viernes, 3 de abril de 2009

Así no: estas cosas no debían pasar.

La FIA ha expresado que los comisarios se sienten "realmente engañados por Hamilton y McLaren" ya que penalizaron injustamente a Jarno Trulli. (GMM)

Ya el pasado año fue el piloto más sancionado: en Malasia por haber obstaculizado a otros participantes en la sesión de clasificación. En Canadá por no respetar el semáforo rojo a la salida de la calle de garajes y llevarse por delante al finlandés Kimi. En el Gran Premio de Francia por saltarse una variante en la que adelantó al alemán Sebastián Vettel. En el Gran Premio de Bélgicapor volver a saltarse de nuevo una variante para adelantar a Raikkonen. En el Gran Premio de Japón por frenar muy tarde al llegar a la primera curva y Raikkonen, entre otros muchos, se vieron obligados a tomar la primera curva por el exterior para evitar la colisión.

Este año empieza la carrera siendo descalificado (por ahora, porque no se descartan más sanciones) por mentir y engañar a los comisiarios, lo que le supuso una inmerecida sanción a Trulli.

Contrarios a las declaraciones de McLaren, la FIA ha insistido en que tanto el equipo como Lewis Hamilton engañaron a los comisarios durante la investigación del pasado domingo en Albert Park.

Total, que Hamilton ha perdido merecidamente todos los puntos y ha sido descalificado: yo me pregunto, ¿cuando se va a atrever una federación a quitar la licencia a quien, sabiendo que lo hace, recurre a la mentira y la trampa?: creo que la respuesta es NUNCA, y lo siento, porque la pasividad de los directivos federativos hace que sea un deporte lleno de desconfianza donde los piratas puede subir al podio sin ruborizarse (hasta mintiendo para que sea sancionado otro piloto): a lo mejor habría que pensar en hacer un reconocimiento expreso y junto al campeonato de pilotos y constructores añadir el de mentirosos y tramposos . Si se permite desde los inicios de la competición el recurrir a las trampas y se justifica con argumentos del estilo de "es lo normal", no es de extrañar que al llegar a la cumbre haya quien lo hace con los bolsillos llenos de porquería.

El domingo hay sesión doble: al circuito a entrenar y a la tele a seguir vibrando con la buena gente que, además, conduce como los ángeles (incondicional con Fernando, Pedro y Marc).

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