http://www.hazlorealidadconshell.com/velocitaIII/#/homeLa FIA y la Federación Aragonesa han publicado el reglamento técnico para este año que iremos comentando.
Hoy vamos a mencionar la gasolina y, como siempre, compararemos con la Fórmula 1.
Los requisitos básicos que todos pedimos al combustible son un mayor rendimiento al menor coste, para lo que solemos fijarnos en el precio y los kilómetros recorridos.
Pero en competición se requiere más; todos estamos ya acostumbrados a hablar del peso y además hay que tener en cuenta el efecto sobre el motor, por lo que el principal reto es desarrollar un combustible que cumpla las normativas oficiales y que a la vez genere tanta potencia como sea posible, reduzca el consumo y alargue la vida del motor.
La alta velocidad de combustión exige unas prestaciones especiales para utilizar en un motor que va hasta a 19.000 rpm (¡aproximadamente unas 150 combustiones por segundo!); por ejemplo, Shell, marca que con el Santander y gracias a Ferrari se ha fijado al corazón de las personas que seguimos la F1, desarrolló una tecnología que llamó de Modificación de Fricción (TMF), con potentes agentes limpiadores, que permitía incrementar los caballos de potencia porque reducía la fricción del pistón.
En el karting, pese a que los motores son de alto rendimiento (de fábrica el que utiliza Jon llega a las 13.000 vueltas) tiene limitado el uso del combustible al “tipo gasolina comercial de 98 octanos sin plomo” (art. 1.26.1 del Reglamento Técnico) y se entiende por combustible comercial al de automoción con exclusión de ningún otro aditivo, refinado por una compañía petrolera y distribuido corrientemente por las estaciones de servicio del lugar en donde se desarrolla la prueba, de venta comercial corriente (art. 2.26.7 del Reglamento Técnico Nacional).
O sea, el karting no permite beneficiarse de los avances técnicos, porque se busca una igualdad entre los vehículos (¿os suena esto también la F1?), así que los equipos tenemos que buscar marcas de confianza que tengan una amplia red de distribución.
Por cierto, buscando información, me he encontrado con unos datos curiosos de Shell: por
ejemplo, que tiene una fundación (Proyecto Stela) dirigida a formar e incorporar laboralmente a jóvenes con Síndrome de Down, que tiene un compromiso con el desarrollo sostenible o que tiene una declaración de principios basados en la honestidad, la integridad y el respeto por las personas: valores que quizás echamos de menos en otros equipos de Fernando.
Pero bueno, no todo es seriedad, que Shell, además de la campaña que todos conocemos por la tele de las miniaturas, tiene un divertido juego (clikea aquí para probarlo) que nos permite conducirlas por un escritorio al que no le falta detalle: yo he encontrado varios cuadernos publicitarios y banderas de Asturias: esto ya es una auténtica declaración de voluntades y demostración de cómo todo lo que toca Alonso cambia de valor. A ver quién encuentra algún detalle más, prueba en http://www.hazlorealidadconshell.com/velocitaIII/#/home.
Hoy vamos a mencionar la gasolina y, como siempre, compararemos con la Fórmula 1.
Los requisitos básicos que todos pedimos al combustible son un mayor rendimiento al menor coste, para lo que solemos fijarnos en el precio y los kilómetros recorridos.
Pero en competición se requiere más; todos estamos ya acostumbrados a hablar del peso y además hay que tener en cuenta el efecto sobre el motor, por lo que el principal reto es desarrollar un combustible que cumpla las normativas oficiales y que a la vez genere tanta potencia como sea posible, reduzca el consumo y alargue la vida del motor.
La alta velocidad de combustión exige unas prestaciones especiales para utilizar en un motor que va hasta a 19.000 rpm (¡aproximadamente unas 150 combustiones por segundo!); por ejemplo, Shell, marca que con el Santander y gracias a Ferrari se ha fijado al corazón de las personas que seguimos la F1, desarrolló una tecnología que llamó de Modificación de Fricción (TMF), con potentes agentes limpiadores, que permitía incrementar los caballos de potencia porque reducía la fricción del pistón.
En el karting, pese a que los motores son de alto rendimiento (de fábrica el que utiliza Jon llega a las 13.000 vueltas) tiene limitado el uso del combustible al “tipo gasolina comercial de 98 octanos sin plomo” (art. 1.26.1 del Reglamento Técnico) y se entiende por combustible comercial al de automoción con exclusión de ningún otro aditivo, refinado por una compañía petrolera y distribuido corrientemente por las estaciones de servicio del lugar en donde se desarrolla la prueba, de venta comercial corriente (art. 2.26.7 del Reglamento Técnico Nacional).
O sea, el karting no permite beneficiarse de los avances técnicos, porque se busca una igualdad entre los vehículos (¿os suena esto también la F1?), así que los equipos tenemos que buscar marcas de confianza que tengan una amplia red de distribución.
Por cierto, buscando información, me he encontrado con unos datos curiosos de Shell: por
ejemplo, que tiene una fundación (Proyecto Stela) dirigida a formar e incorporar laboralmente a jóvenes con Síndrome de Down, que tiene un compromiso con el desarrollo sostenible o que tiene una declaración de principios basados en la honestidad, la integridad y el respeto por las personas: valores que quizás echamos de menos en otros equipos de Fernando.Pero bueno, no todo es seriedad, que Shell, además de la campaña que todos conocemos por la tele de las miniaturas, tiene un divertido juego (clikea aquí para probarlo) que nos permite conducirlas por un escritorio al que no le falta detalle: yo he encontrado varios cuadernos publicitarios y banderas de Asturias: esto ya es una auténtica declaración de voluntades y demostración de cómo todo lo que toca Alonso cambia de valor. A ver quién encuentra algún detalle más, prueba en http://www.hazlorealidadconshell.com/velocitaIII/#/home.
Las limitaciones en el combustible para los karts parecen lógicas, cuanto menos gasto más gente participará.
ResponderEliminarShell está haciendo muy buena labor según leo en la entrada, ahora que consigan mejorar el combustible para el ferrari de Fernando que no debemso dar ninguna ventaja a otras escuderías, saludos
Precisamente parece ser que uno de los carros de batalla es el problema del exceso de consumo con referencia a McLaren y Renault; por eso tiene su actualidad el tema.
ResponderEliminarSe justifican muchas medidas por el abaratamiento, por ejemplo la limitación de hacer test en la F1, pero como participantes no lo tenemos claro que sea así. La gasolina si es preciso regularla y de hecho la alternativa a la comercial es un vendida por Panta, que es una marca italiana, que sale a casi 3 Euros el litro.
Esperemos que terminen resolviendo ese problema o preocupación que ahora mismo tienen con la gasolina, porque en eso van con desventaja respecto a McLaren. Pero como quiera como conduzca el piloto también dice mucho y en eso Alonso sabemos que lo hace de lujo así que puede ahorrrar.
ResponderEliminarNo sabía que en los karting no se podían beneficiar de los avances, leyendoos a vosotros me estoy enterando bien de todo este mundillo de los karting.
Saludos